El pasaje de Romanos 3:1-31 es una profunda reflexión sobre la y la condición del ser humano. Pablo, en su carta a los romanos, aborda la pregunta sobre el valor de ser judío y la circuncisión, afirmando que hay un en ser parte del pueblo elegido, ya que a ellos se les confiaron las (v. 2). Sin embargo, el apóstol también señala que tanto judíos como gentiles están bajo el (v. 9), lo que resalta la universalidad de la necesidad de redención.